Restauran Obra Icónica del maestro guatemalteco Efraín Recinos
Restauran Obra Icónica del maestro guatemalteco Efraín Recinos
La figura del maestro Efraín Recinos ha sido retratada en muchas publicaciones en donde ha quedado impreso su proceso de entrega, sus convicciones y pasión por la vida. Su ingenio creativo se ha materializado en muchas de sus obras majestuosas, obras que han otorgado a Guatemala una identidad propia, como el Teatro Nacional, el Teatro al Aire Libre, el Conservatorio Nacional de Música, el Crédito Hipotecario Nacional y los relieves de la Hemeroteca, entre otras.
Su temple y presencia se han moldeado en esculturas de importante presencia como Música Grande, la Guatemalita y Caballero del Quetzal. El amor que sentía por la música ha quedado fundada con una constante presencia en su hogar, su teatro y sus difusores acústicos.
Música Grande es una escultura, que hoy en día se encuentra en el Museo de Arte Moderno de Guatemala y la cual es un símbolo de la identidad guatemalteca representando nuestro símbolo nacional: La Marimba. Está compuesta por figuras humanoides que muestran los dientes como enardecidos y su mirada es eufórica. En sus manos sostienen cañones y batones, elementos bélicos y represivos utilizados por las autoridades para ejercer control de forma violenta hacia los actos subversivos y el alzamiento popular. Los pies de la las figuras humadas están revestidos con sandalias (caites), indumentaria común y antiguamente de uso diario de los indígenas de nuestro país.
Los cuerpos se encuentran fundidos con el instrumento musical y símbolo nacional, logrando unificar las demás figuras. Sobresalen seis manos con cañones que apuntan al espectador y que parecieran las baquetas con las que se interpreta el instrumento musical, los mismos que amenazan a quien se encuentre en frente de la obra.
La obra está compuesta de varios ensambles y empalmes, con distintos tipos de madera como pino, playwood, cedro, durpanel y sauco, entre otras. Éstas permiten dar contrastes a la composición, sin embargo, los materiales son bastante inestables y propicios al ataque de agentes biológicos. Las áreas externas se encuentran realizadas con contrachapado con betas sobresalientes y se aprecia la incrustación de piezas diminutas, lo cual le brinda esa elegancia y delicadeza que acostumbraba el maestro Recinos.
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Por el estado de conservación en el que se encontraba la obra y el riesgo que se corría por la posible pérdida de una de las obras ícono de la identidad guatemalteca, a través de un convenio público-privado entre el Ministerio de Cultura y Deporte y Fundación CREA (Rozas-Botrán) se logra la restauración de la obra Música Grande del maestro Efraín Recinos.
DATOS DEL PROCESO DE RESTAURACIÓN:
Durante los 15 meses y medio que duró la restauración de Música Grande, se realizaron procesos para devolver a la escultura tanto estabilidad estructural, como un aspecto estético propio de los materiales que la conforman. Dado el severo ataque biológico (polilla) que sufrió durante muchos años, la estructura que la sostiene perdió estabilidad y muchas de las piezas perdieron soporte (madera), las piezas más afectadas fueron las teclas y manos. Se inició el proceso de fumigación que se realizó por medio de gases y de aspersión, encapsulando la obra por varios días para poder eliminar cualquier agente vivo que estuviera dentro de la escultura.
Posteriormente se llevó a cabo el proceso de identificación de piezas, registro y etiquetado de las piezas que conforman la obra. Seguidamente se realizó el desmontaje de la obra y previo a los procesos de limpieza y eliminación de barnices se realizaron pruebas en el laboratorio científico de CREA para dar paso a los procesos de limpieza, eliminación de barnices, resane, colocación de injertos y relleno de cavernas. Debido al daño que presentaron algunas piezas como brazos, cabezas, sandalias, teclas y piernas se reemplazaron por piezas de madera de cedro.
Las piezas que originalmente tenían clavos, fueron unidas con tarugos hechos con madera de cedro, dado que los clavos originales presentaron oxidación. Se reemplazó la estructura general por una estructura de madera de cedro, las piezas se curaron previamente y se les aplicó un tratamiento antipolilla para prevenir futuros ataques.
Las piezas que se resanaron y a las que se les colocó injertos se les integró color de forma puntual.
Se realizó el montaje de la obra, que nuevamente se expone al público.
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