Vendedores de minoristas tienen un buen arranque de año


Las ventas minoristas en Estados Unidos tuvieron un incremento inesperado en enero, apoyadas por mayores compras de materiales de construcción y un gasto discrecional más alto, pero las cifras de diciembre fueron mucho más débiles de lo que pensaba.

El reporte del Departamento de Comercio fue positivo para la economía tras una serie de débiles lecturas en diciembre, así como una fuerte moderación en el ritmo del crecimiento del empleo en febrero.

Pese a todo, el aumento de las ventas minoristas en enero solo recuperó una fracción del desplome del mes previo, dejando intactas por vez primera las expectativas de una fuerte desaceleración del crecimiento económico en el primer trimestre.

“Las ventas lograron solo una tenue reversión en enero frente a la profunda congelación de diciembre”, dijo Douglas Porter, economista jefe de BMO Capital Markets en Toronto.”Aunque esperamos una mayor remontada en el próximo par de meses, la gran historia aquí es que el gran motor de la economía se está enfriando”.

Las ventas minoristas subieron un 0,2 por ciento.

El reporte de diciembre se revisó para mostrar un descenso del 1,6 por ciento en vez de la baja del 1,2 por ciento que se informó originalmente. Fue el mayor declive desde septiembre del 2009, cuando la economía estaba saliendo de la recesión.

Economistas sondeados por Reuters esperaban que el indicador se mantuviera sin cambios en enero. En la comparación anual, las ventas aumentaron un 2,3 por ciento en enero.

La presentación del reporte de ventas minoristas de enero fue aplazado por la paralización parcial de 35 días que sufrió el Gobierno federal y que concluyó el 25 de enero.

El informe relativo a febrero, cuya publicación estaba prevista para el jueves, no se conocerá hasta el 1 de abril.

Excluyendo automóviles, gasolina, materiales de construcción y servicios alimenticios, las ventas minoristas rebotaron un 1,1 por ciento en enero, tras un desplome revisado a la baja del 2,3 por ciento en diciembre.

Estas denominadas ventas minoristas subyacentes corresponden de forma más estrecha con el componente del gasto del consumidor del Producto Interno Bruto (PIB).

En un principio se reportó un descenso del 1,7 por ciento en diciembre.

La revisión bajista de las ventas minoristas subyacentes del último mes del 2018 podría tener un impacto sobre la estimación del PIB del Gobierno para el cuarto trimestre.

El Gobierno dijo el mes pasado que la economía creció a una tasa anual del 2,6 por ciento en los tres últimos meses de 2018.

No obstante, los reportes de diciembre sobre déficit comercial y gasto en construcción han llevado a los economistas a creer que la estimación de crecimiento del PIB en el cuarto trimestre será revisada a la baja cuando el Gobierno publique su revisión más adelante en el mes.

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